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¿qué me pasa doctor?
"A medida que la edad de la mujer aumenta, se produce una disminución del número y de la calidad de los ovocitos. Es necesaria una preservación de la fertilidad de carácter social para que mujeres jóvenes de entre 28-35 años que desean voluntariamente posponer su maternidad tengan la opción de ser madres en un futuro con su propia carga genética", explica la Dra. Victoria Verdú, coordinadora de Ginecología de la Clínica Ginefiv. Y es que, según señala la Dra. Laura de la Fuente, miembro de la junta directiva de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF), "la tecnología utilizada hoy en día para preservar la fertilidad femenina, vitrificación ovocitaria, tiene fiabilidad suficiente para poder conservar el gameto femenino por tiempo indefinido, sin que pierda calidad; esto permitiría demorar la maternidad y poder planificarla en función de los intereses particulares de la mujer, lo cual no está exento de los riesgos que conlleva una maternidad tardía".
La vitrificación de óvulos ha aumentado un 27% en los últimos años en España, pasando de 3.601 vitrificaciones en 2014 a 4.577 en 2015, según los últimos datos de la Sociedad Española de Fertilidad, que ha vinculado este crecimiento a la tendencia de las mujeres españolas de retrasar de forma voluntaria la edad en la que tienen el primer hijo. “Entre los motivos que llevan a las mujeres a apostar por la congelación de óvulos están principalmente la ausencia de pareja, en un 80% de los casos; razones profesionales, en un 25%; y económicas, en un 15%”, según expone el Dr. José Codesido, presidente de la Asociación Nacional de las Clínicas de Reproducción Asistida (ANACER).
El Dr. Guillermo González, presidente de la Federación de Planificación Familiar Estatal, asegura que “es necesario realizar una labor informativa dirigida a las mujeres jóvenes y a los ginecólogos generales para que se dé a conocer la posibilidad real de preservar la fertilidad”. Además, el Dr. Koldo Carbonero, presidente de la Sección de Esterilidad e Infertilidad de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), apunta que “los ginecólogos debemos incorporar a las consultas seguimientos para conocer la reserva ovárica e incluso consultar a las pacientes sobre sus intenciones de ser madre”.
Otro de los temas abordados en la mesa redonda organizada por Ginefiv ha sido desgranar la importancia que ocupa la seguridad en los procesos de reproducción asistida. “Las pacientes que llegan a la clínica tienen muchas dudas en cuanto al procedimiento y el éxito del tratamiento. Sin embargo, últimamente y desde que han salido a la luz casos de confusión de gametos en otros países, las mujeres se preocupan también por la seguridad de los tratamientos. La confusión de muestras o en la implantación de los embriones es una de sus grandes preocupaciones. Para garantizar el éxito de los tratamientos, los pacientes necesitan sentirse seguros y evitar el estrés”, explica la Dra. Silvia Lobo, responsable de Atención al Paciente de Ginefiv.
Es cierto que los procesos de un laboratorio de fecundación in vitro nada se deja al azar, los puntos críticos que presentan peligro de confusión están absolutamente identificados y aún se usa el sistema de doble testigo para garantizar que no se produzca ningún error. “Aun así, sabemos que la seguridad en cada uno de los procesos que se realizan en el laboratorio de fecundación in vitro influye en el éxito de los tratamientos. Por este motivo, Ginefiv ha implantado un avance tecnológico que aumenta la seguridad de los pacientes a través de la identificación de cada una de sus muestras por radiofrecuencia, el IVF Patrol”, explica el Dr. Vicente Badajoz, responsable de laboratorio de la Clínica Ginefiv.
IVF Patrol es un proyecto pionero de desarrollo interno de Ginefiv cuyo objetivo es lograr la trazabilidad de muestras dentro de un laboratorio de Fecundación in Vitro mediante el uso de la tecnología de radiofrecuencia. Tiene un claro impacto en la mejora de la seguridad en los tratamientos lo que se traduce en asegurar que no se produzca un error a la hora de cruzar los gametos para su fecundación y de no transferir los embriones resultantes al útero de una mujer equivocada.
La seguridad es un tema de especial importancia en el ámbito médico. Según ha concluido Elena Gómez, representante de la Fundación para la Seguridad del Paciente (FIDISP), “la formación en materia de seguridad clínica, así como estrategias de I+D+I para ofrecer servicios efectivos y éticos es el camino a seguir”.
Además, se presentó la campaña de Ginefiv “Cuida tu fertilidad”, cuyo objetivo es concienciar sobre la importancia de cuidar la fertilidad desde una edad temprana y divulgar buenos hábitos que ayuden a preservar la fertilidad en ambos sexos, rompiendo los tabús que la rodean. El 50% de los problemas de fertilidad se debe a causas femeninas y conocer la reserva ovárica es un dato necesario para saber la cantidad de los óvulos -que se ve reducida considerablemente con el paso del tiempo, así como la calidad de los mismos-. Como consecuencia de la reducción de la reserva ovárica se produce una disminución de la capacidad reproductiva y un aumento del número de inseminaciones fallidas, abortos y malformaciones fetales. Este dato ofrece a la mujer la posibilidad de elegir si es conveniente postergar la maternidad, o preservar la fertilidad para mantener óvulos que sean útiles en el momento que se quiera ser madre.
Por este motivo, el objetivo de la clínica es promover buenos hábitos y dar a conocer a las mujeres la calidad y cantidad de óvulos que poseen y así mejorar la salud reproductiva. Las personas interesadas deberán entrar en la web www.testfertilidad.es y solicitar este test de la fertilidad, completando previamente un breve estudio sobre sus hábitos. Los participantes podrán optar a un análisis de la hormona antimülleriana (AMH).