Vuelve a disfrutar de una de las mejores superproducciones de los últimos años: Tierra Amarga
Intentarán que su historia de amor fracase
Isabela y Eduardo se ponen celosos al ver la complicidad que existe entre Alejandro y Sofía. Las muestras de cariño entre ellos son cada vez más evidentes.
Sofía llega la empresa Alva para comer con su marido Alejandro. El empresario está hablando, en ese momento, con Isabela. La hija de Jimena quiere hacer algunos cambios en su hotel y necesita la ayuda del hermano de Vanesa. Sofía se muestra cariñosa con su esposo y acaban besándose los dos bajo la atenta mirada de Isabela y Eduardo que está, también, en la empresa familiar. Verles a ambos en actitud cariñosa, desata los celos de la hermana de Karen y del hijo de Lucía.
Isabela está muy enojada con Sofía y no puede evitar enfandarse con ella. Al encontrarse con su íntima amiga, Vanesa, le cuenta lo ocurrido entre su hermano y la hija de Poncho. La mujer de Ernesto cree que Sofía se está aprovechando de su hermano y que Alejandro se está dejando influenciar por ella. Ni Isabela ni Vanesa quieren a Sofía en sus vidas.
Eduardo tampoco encaja bien que Alejandro y Sofía estén tan acaramelados y se desahoga con su amigo Álvaro, al que encargó dañar el motor de la turbina del avión privado de Alejandro para que se precipatará al mar.
El hijo de Lucía no está dispuesto a renunciar al amor de Sofía. Asegura a su amigo que la joven es solo suya y no va a permitir que su hermanastro se la arrebate. Eduardo está muy centrado en la relación sentimental de Alejandro con la hermana de Rebeca y no es consciente de que su hermanastro está investigando los terrenos que compró en La Paz con el dinero de la empresa familiar.
En casa, Eduardo vuelve a ver a Alejandro y Sofía besándose apasionadamente y, cuando su hermanastro se va a trabajar, pide explicaciones a la hija de Poncho. La joven no quiere saber nada de él. "Eres un mentiroso", le manifiesta muy enfadada a Eduardo.
El hermanastro de Rebeca propone a Sofía que se divorcie de Alejandro para poder estar juntos y le confiesa su amor. Pero, ella no está por la labor. Eduardo amenaza a la joven con llevar a prisión a su padre Poncho como ya hizo con el amigo de su progenitor, Fausto. Pero, ella hace caso omiso a sus advertencias. En ese momento, aparecen Isabela y Ernesto y los sorprenden peleándose y muy cerca el uno del otro. Isabela, que ya sospechaba de la buena fe de Sofía, al verles tan cómplices hace que desconfíe todavía más de ella.
Las amenazas no sirven con Sofía, así que Eduardo intenta convencer a Rebeca para que le ayude a recuperar a su hermana. La joven no se muestra muy dispuesta a prestarle su ayuda, así que el hijo de Lucía le lanza una seria advertencia: "Si no me obedeces, toda tu familia va a acabar en la cárcel". La hermana de Sofía se asusta, no quiere por nada del mundo dejar de vivir rodeada de lujo y comodidades.