Los Guerrero destapan los trapos sucios de Augusto para desprestigiarlo públicamente

Jesús y Samuel están decididos a acabar con Augusto. Sospechan que el malvado empresario está detrás de la detención de Damián, acusado de haber asesinado a Iker, el exnovio de Doménica. Así que, ahora, les toca a ellos mover ficha.

El hijo mayor de Octavio acude con Samuel a una de las bodegas que posee Ruiz Montalvo para ver el lote de leche que va a destinar a niños huérfanos. El marido de Victoriana quiere hacer un donativo a las instituciones que acogen a niños sin hogar para ser elegido como alcalde de su ciudad. Pero, Jesús y su hermano Samuel se encargarán de que el plan de Augusto no salga como él espera.

Los Guerrero están convencidos que la leche está dañada y destrozan los paquetes almacenados en la bodega y los rocían con agua para que sean inservibles. Samuel lo graba todo con el móvil para después enviar dicho vídeo a los medios de comunicación y perjudicar así a Ruiz Montalvo.

Los hombres que trabajan para Augusto, le informan de lo que ha pasado. El padre de Carlota sospecha que los hermanos Sánchez están detrás de lo sucedido. Mientras tanto, Abel, el abogado amigo de los Guerrero, confirma a Jesús, tras analizar la leche, que efectivamente está contaminada. El hijo de Octavio automáticamente envía a los periodistas el vídeo grabado por Samuel para que se hagan eco de la noticia.

Al día siguiente, Ruiz Montalvo se presenta ante los medios de comunicación para presentarse como candidato a a la alcadía y los reporteros le bombardean a preguntas. El empresario niega que el lote de leche, que procede de su empresa láctea, esté contaminado y asegura, para salir del paso, que se trata de un ataque político. "La información es falsa. Se trata de un ataque político. El donativo es de leche en óptimas condiciones. Yo soy un hombre de honor que se preocupa por la niñez mexicana", asegura muy serio ante los periodistas.