Vuelve a disfrutar de una de las mejores superproducciones de los últimos años: Tierra Amarga
Momento destacado
Doruk y Asiye, elegidos como representantes de los alumnos, disfrutan de más tiempo juntos y se regalan una foto especial por San Valentín.
Una de las novedades propuestas por Resul para este trimestre en el colegio Ataman es escoger a un representante de los alumnos. Esta persona se encargará de trasladar las peticiones de todos y asumirá una gran responsabilidad dentro del centro.
Doruk no se preocupa demasiado cuando ve a los otros candidatos de distintos cursos… hasta que Asiye se le acerca y le confiesa que su hermano y sus primos quieren que se presente, aunque todavía no lo tiene decidido.
El hijo de Akif, confiado en su popularidad, le pide que le avise si finalmente se apunta, porque no le gustaría verla perder: "Si tú te presentas, yo me retiro", le dice con su habitual soberbia.
Asiye no puede creer la arrogancia de Doruk. "¿Piensas que si te tengo a ti por rival la gente no me votará?", le responde, molesta. Mientras Doruk da por hecho que la victoria es suya, Asiye piensa que lo que le falta es humildad.
Finalmente, la hermana de Emel se anima a presentar su candidatura y llega a un acuerdo con Doruk: si gana él, tendrán una cita para cenar el día de San Valentín; si, por el contrario, ella resulta elegida, el hijo de Nebahat tendrá que limpiar un refugio de animales.
El día de las elecciones, tras los discursos de ambos, los alumnos votan y Resul y Akif se encargan de contar los votos. Para sorpresa de todos, ¡hay un empate técnico!
Cumpliendo su trato, primero visitan juntos el refugio de animales y después terminan celebrando San Valentín con una cena especial. Entre ellos, las chispas vuelven a saltar. Doruk, que sigue profundamente enam orado de Asiye, aprovecha el momento para lanzarle la gran pregunta: "¿Volverías a ser mi novia?", pero Asiye, prudente, le deja claro que aún no es el momento: "Antes tenemos que ser buenos amigos".
Doruk se conforma, por ahora, con su amistad, pero no piensa rendirse tan fácilmente. Justo entonces, un camarero interrumpe el momento para ofrecerles una foto especial por San Valentín. Aunque no sean pareja oficial, acceden a hacérsela y la imagen no puede ser más bonita. ¡Vaya momentazo!