El hijo de don Alberto solo tiene ojos para Mariana

La química entre Luis Alberto y Mariana culmina con una noche de pasión

La atracción entre Luis Alberto y Mariana se intensifica y los lleva a una noche de pasión.

Luis Alberto y Mariana viven una experiencia aterradora. El helicóptero en el que viajan a Michoacán por temas laborales se encuentra en medio de una fuerte tormenta, y el piloto acaba perdiendo el control. Finalmente, debe realizar un aterrizaje de emergencia y logra salvar la vida del hijo de don Alberto y de Villarreal, aunque la familia Salvatierra cree que al joven millonario y a su acompañante les ha ocurrido algo malo.

Debido al fuerte temporal, Luis Alberto y Mariana se refugian en una vieja cabaña que encuentran en medio del bosque, mientras el piloto intenta ponerse en contacto con la torre de control para pedir ayuda.

Los jóvenes están empapados y encuentran ropa en un armario para cambiarse. Mariana le pide a Luis Alberto que no mire mientras se quita la ropa mojada, pero, al final, es inevitable y acaban besándose y pasando una noche de pasión.

Mariana teme que, tras entregarse a él, el hijo de don Alberto pierda su interés por ella, por lo que le pregunta directamente qué va a ocurrir entre ellos cuando los rescaten. El joven lo tiene claro: "Voy a gritar a los cuatro vientos que estoy enamorado de ti", le confiesa a Villarreal. Además, le hace una firme promesa: le asegura que jamás volverá a pisar un casino en su vida.

Cuando finalmente son rescatados, el hijo de Elena regresa a la mansión familiar con Mariana y la presenta como su novia ante los medios de comunicación, que se han concentrado en las inmediaciones de su casa. Soraya, que está en la mansión de Luis Alberto, queda en shock al escuchar que el joven tiene un idilio con Villarreal. La malvada jefa de marketing de la empresa de don Alberto sabe que ha perdido para siempre al que fuera su novio.