Guillermo Quintanilla, el responsable de manejar el negocio familiar
El segundo de los Robles no es guapo pero le va bien con las mujeres. Es el operador del negocio familiar, posee el don de la palabra y del trato diplomático. Se siente distante de Guadalupe, a quien quiere pese a considerarlo una bestia. Inteligente, afable y traicionero. Jamás se ha manchado las manos de sangre, aunque sí ha mandado a matar a muchos.