Poncho es un chico que no tiene familia y ha trabajado junto a Manuel en el terminal pesquero desde que tenía quince años. Siempre ha sido bueno para contar chistes y hacer imitaciones de las personas que lo rodean. Todos sus compañeros lo quieren mucho; es alegre, honrado, generoso y siempre le hace favores a la gente sin esperar nada a cambio. Su gran secreto es que está enamorado de Stella, la novia de Manuel, y sin maldad ha hecho infinitos intentos para convencerlos individualmente de terminar su relación. Él piensa que a su lado Stella podría ser muy feliz y le duele saber que Manuel solo la ve como un pasatiempos.