La madre de Ipek se muestra esquiva cuando Cahide pregunta por sus hijas

Tras salir de la cárcel después de cumplir una condena de más de 20 años acusada de asesinar a su marido, Cahide emprende la búsqueda de sus tres hijas. A pesar de los chantajes de Cemal, ella se muestra decidida a encontrarlas y cree que en el pueblo de Gunesli Baçe puede encontrar algunas pistas.

Como necesita dinero, ha comenzado a trabajar en la fábrica de Tekin Malik, ya que tiene conocimientos de agricultura y puede ser útil su presencia allí. Se está alojando en la casa de Afet y todas las personas con las que ha hablado se han mostrado muy amables con ella y la intentan ayudar en todo.

Pero en el fondo nadie sabe muy bien ni por qué estuvo en la cárcel ni qué es lo que realmente busca en el pueblo, así que Afet le pregunta directamente. La sorpresa es mayúscula cuando Cahide le dice que busca a sus tres hijas y le enseña una foto de ellas cuando eran pequeñas. Afet enseguida descubre que una de esas niñas es Ipek, la cría que ha estado cuidando desde que la rescató del orfanato y se muestra esquiva y reacia a contarle nada a Cahide. De hecho, intenta quitarle la idea de la cabeza asegurando que está perdiendo el tiempo, ante la sorpresa de su amiga Perihan, que también está en la mesa con ellas y piensa que Ipek podría ser una de las niñas que anda buscando Cahide.

¿Por qué ha reaccionado Afet de esta manera? Antes de confiarle la verdadera identidad de Ipek a Cahide, Afet quiere saber exactamente qué tipo de persona es y por qué está en el pueblo. Lo que descubra no le va a gustar nada.