Melek y Zehra vuelven a separarse por culpa de los Kirman

Melek está muy preocupada por Zehra y su nieto Cemal, quienes han sido secuestrados por el problemático Alí

Alí ha vuelto a hacer de las suyas. Esta vez, ha secuestrado a su mujer Zehra y a su hijo Cemal para eludir la cárcel.

Devra ha ideado un plan para quedarse con todas las pertenencias de los Kirman: la mansión y la tienda familiar de alfombras. Y, entre sus objetivos, está también que Melek no se vaya a Estambul. Así que está dispuesto a ayudar a Alí para que no vaya a prisión por haber matado a uno de los hombres que trabajaban para su familia a cambio de que se oculte durante un tiempo con Zehra y su hijo Cemal.

Si Zehra desaparece, la profesora jamás se irá de Harmanli y eso es precisamente lo que quiere el hijo de Behiye. No puede soportar la idea de vivir lejos de Melek.

Al principio, Alí se opone al plan de su primo, pero, al final, acaba aceptándolo al hacerle ver el hijo de Kadim que ellos son su seguro de vida.

El hermano de Azad llega a la mansión y se lleva de allí a Zehra y al pequeño Cemal engañados. Le pone como disculpa que van a ver al abogado para hablar de su divorcio. Pero, cuando van en el coche, la hija de Melek se percata que es una trampa y no se equivoca. Alí lleva a la Joven a una casa en ruinas, pérdida en medio del bosque en la que no se puede vivir. Está sucia, no tiene ventanas y carece de utensilios para cocinar.

Zehra le pide encarecidamente que la lleve a otro lado. "No podemos quedarnos aquí Alí, Cemal enfermará. No es sano para el bebé", le asegura al hermano de Azad. Pero, el joven no está dispuesto a marcharse de allí y deja a la hija de Melek encerrada mientras él va a comprar. El hijo de Kadim tiene miedo de que su mujer huya del lugar. Si eso ocurriera, él acabaría en prisión y eso es lo que precisamente quiere evitar.

Mientras tanto, Melek busca desesperadamente a su hija con la ayuda de Azad. Pero, sin resultados. Cuando le pregunta a Devra si sabe dónde está Zhera y su hijo, les insinúa que Alí ha podido ser el responsable de su desaparición.

La hija de Sami está desesperada. Ya no aguanta más y pide a Azad que llame a la policía para denunciar el secuestro de su hija y su nieto. Además, le exige que comunique a los agentes que Alí es un asesino y un drogadicto.

Zümrut ruega a Azad que no denuncia a su propio hermano y, el que va a ser líder de la familia Kirman, consigue convencer a Melek para que le permita dar con el paradero de su hermano por su cuenta para poder salvar a Zehra y a su pequeño.