No se esperaba eso de su madre

Alicia se lleva una gran decepción con su madre doña Eva: descubre su debilidad por el juego y su afición a apropiarse de lo ajeno

Alicia sorprende a su madre apostando en un casino y descubre su afición a apropiarse de lo ajeno, provocándole una gran decepción.

Alicia acude a un casino acompañada por sus amigas Fedora y Rebeca en busca de su madre y encuentra a doña Eva apostando. La decepción de la madre de Yuri es máxima. No puede creer que su progenitora esté fundiendo el poco dinero que tienen en el juego y no duda en llamarle la atención.

Además, le recrimina que haya robado una cadena de gran valor de Rebeca y la haya llevado a una casa de empeños para conseguir dinero con el que seguir apostando. Doña Eva niega ser una ladrona y acusa a Fedora de envenenar a su hija con mentiras.

Sin embargo, Fedora, que no tiene pelos en la lengua, le enfrenta diciendo que no es honesta y que existen imágenes de las cámaras de seguridad de la casa de Rebeca que captan cómo robó su cadena. Pero, la madre de Alicia sigue negando su culpabilidad. "Soy una dama intachable y tú Alicia deberías estar a mi lado", les asegura muy enojada.

Ya en casa de Rebeca, donde viven Alicia y doña Eva a cambio de cuidarla debido a su deterioro mental, la exmujer de Sergio intenta dialogar con su madre sin mucho éxito. "¿Vas a seguir acusándome?, ¿no te basta con humillarme públicamente?", le pregunta a su hija exaltada.

Montiel está muy enfadada con su progenitora porque no solo ha sustraído la cadena de Rebeca sino que también a ella le ha robado el dinero que su hijo Gonzalo le entregó para emprender un negocio y conseguir así salir del agujero económico en el que están metidas tras ser expulsadas de la mansión por Sergio.

Doña Eva, que le gusta vivir rodeada de lujo y comodidades, culpa a su hija de su precaria situación económica. "Por tu culpa me he convertido en una indigente", le asegura a Alicia indignada.